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| Se lleva Chivas el Clásico 202.
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A+ A- Las Chivas de Guadalajara consiguieron su primera victoria en el Clásico ante las Águilas del América, desde 2003, con el Estadio Azteca como escenario, luego de imponerse 2-1, con goles de Omar Arellano, en el partido más importante de la jornada 14 del Torneo Apertura 2008.
Omar Arellano abrió el marcador al minuto 11, luego de un servicio por el costado izquierdo que remató con la zurda ante la mala obertura defensiva. La dinastía Arellano es la primera en marcar tantos en el Clásico, su abuelo lo hizo en cinco ocasiones y su papá en una. Además, con su tanto al minuto 71 registró su primer doblete en Primera División.
El tanto del empate llegó al minuto 32, luego de un remate con la testa de Sebastián Domínguez a centro de Insúa en tiro de esquina por el costado izquierdo.
Asimismo, es la primera ocasión que Chivas gana tres Clásicos consecutivos desde 1969; a este triunfo se le suma el del torneo anterior en el Jalisco, en el que se impuso 3-2; y el 2-0 en un cotejo amistoso en el Soldier Field de Chicago.
Con ello, Chivas llega a 21 puntos en el Grupo Dos, el de "la muerte", los mismos que los líderes Tecos y Morelia; en tanto, América se queda en 15 unidades en este sector, colocado en la última posición.
Los primeros minutos del cotejo fueron de pleno dominio rojiblanco, que desde el silbatazo inicial se lanzó a la ofensiva por medio de Sergio Santana y Alberto Medina que para fortuna del América no terminó en gol. El rol en los siguientes minutos fue el mismo, con un Chivas desbordado al frente y unas Águilas que se vieron frenadas por la sólida zaga del Guadalajara.
Omar Arellano logró terminar con el 0-0 en la pizarra, tras un error de la zaga; el gol le dio una inyección anímica y de confianza al conjunto tapatío, que no vio frenadas sus intensiones de hacer más abultado el marcador en casa de su mayor enemigo; sin embargo, la reacción del América, aunque tardía, iba a llegar.
Sebastián Domínguez, el hombre que sustituyó a
José Antonio Castro , lesionado, anotó el de la igualada al minuto 32 y fue el parteaguas para que América no se viera intimidado en su propia casa y reaccionara a tiempo para evitar una sorpresa por parte del Rebaño.
El medio tiempo funcionó para que América se relajara y meditara sus acciones; los pupilos de Ramón Díaz ahora fueron los que encajonaron a Chivas en su propio terreno, pero de poco serviría si no aprovechaban las oportunidades de oro como la de Enrique Vera, que voló su disparo en el área chica, sin portero, sin marca, un ridículo monumental.
Antes, Chivas se había salvado, luego de un remate de Salvador Cabañas que desvió Magallón con la testa, pero para fortuna del zaguero del Guadalajara,
Víctor Hugo Hernández desvió a una mano para evitar el tanto; con ello, el duelo se equilibró, América se vio más peligroso, pero de poco sirvió esa imagen.
Al minuto 71, Omar Arellano volvió a hacerse presente en el marcador, esta vez de forma más espectacular, con un disparo con la derecha que colocó en el ángulo superior izquierdo de Memo Ochoa, que pese a la estirada no logró bajar ese balón.
El resto fue para Chivas, al América no sólo lo venció los goles, también la desesperación de verse abajo en el marcador en la recta final del partido; esta vez Salvador Cabañas no logró definir el encuentro, Alfredo Moreno pasó por desapercibido y Guillermo Ochoa no fue factor suficiente para que las Águilas evitaran su primera caída en el Azteca desde 2003.
El árbitro del cotejo fue Paul Delgadillo, quien no intervino en la definición del partido.
26/10/08
Nota 66427
